Según nos cuentan en la escuela de padres de educayaprende.com, la mamitis es una etapa normal en el desarrollo de los niños. En torno a los 2-3 años es habitual que los niños pasen por una fase de fuerte apego a su madre, incluso excesivo. Esta actitud suele preocupar a las familias, pero es algo normal en el desarrollo, una fase necesaria y sana para ellos.
Sin embargo, en edades más tardías, esta dependencia puede adquirir otras formas. Desde el blog de somospsicologos.es, nos recomiendan que cuanto antes se identifique el problema más fácil será su solución. Así, cuanto menos se haya desarrollado la dependencia, más sencillo será ponerle fin. Para poder superar esta etapa, es muy importante, como padres, fomentar su confianza y seguridad. Esto se debe a que se trata de una dificultad que se agrava con el paso del tiempo.